20/05/2022 Clarin.com - Nota [noticia en diferido]

Auditorio con la última tecnología para el Colegio Northlands
Graciela Baduel
El estudio Maletti Zanel Maletti diseñó un zigurat de hormigón que tiene además un anfiteatro al aire libre en la terraza.

Brightman Hall. En Olivos, de Maletti Zanel Maletti Arquitectos. Foto Gustavo Sosa Pinilla. En un lote en esquina, dentro de un entorno de casas bajas y árboles, el edificio para el auditorio del Colegio Northlands aparece como un artefacto de hormigón que impone su presencia sin desentonar. Es que los proyectistas ubicaron la mayor parte del programa en el subsuelo, reduciendo el impacto del volumen de la sala para 500 espectadores. La otra clave de la inserción en la trama urbana son los retiros. El primero (obligatorio) es un zócalo de tres metros sobre ambas calles del terreno, donde se apoya un paseo verde que genera una especie de basamento ascendente de poca altura que toma la escala del barrio, Olivos. En el segundo retiro, el proyecto se eleva hasta la altura máxima permitida con distancias variables hacia la calle, aportando un efecto de escalonamientos volumétricos, que se acentúan hacia arriba con el giro de la sala, que reduce sus dimensiones en los planos hacia la vereda. Edificio-rampa. El Brightman Hall se planta como una continuación del pulmón de manzana. Foto Gustavo Sosa Pinilla Bautizada como Brightman Hall en honor a una de las fundadoras de la institución, Winifred M. Brightman, la nueva sala de conciertos tiene una superficie cubierta de unos 1.700 m2, a los que inteligentemente se sumaron áreas verdes y un segundo espacio para eventos y performances, al aire libre y en la terraza.En un concurso privado a dos vueltas, los integrantes del estudio Maletti Zanel Maletti arquitectos resultaron ganadores gracias a su idea de “teatro + anfiteatro”. Vista aérea del Brightman Hall. Foto Gustavo Sosa Pinilla. “Desde lo semántico entendimos que el mayor activo del lote era el pulmón verde. Entonces pensamos en el edificio como una prolongación de ese espacio central de la manzana y logramos incrementar las áreas verdes en un 36 %, generando un paseo recreativo a modo de rampa que culmina en la terraza vegetalizada”, explica Alberto J. Maletti. El zócalo atenúa el impacto del volumen en el entorno de casas bajas. Foto Gustavo Sosa Pinilla En tanto, la estructura del Brightman Hall es la expresión de su arquitectura, resuelta con la mínima cantidad de elementos para definir y dar sostén tanto a la sala como al paseo ascendente. “El proyecto no tiene una sola columna -describe el arquitecto-, los tímpanos de la sala son el gran sostén, todo cuelga de estos elementos”.La sala se ubica en el centro para dar lugar al máximo desarrollo posible del paseo que la rodea con el objetivo de atenuar las pendientes. Ese giro de 23° genera tensiones espaciales con el paseo y permite la circulación por debajo de los planos inclinados de la losa de la sala. La sala del Brightman Hall está girada 23 ° para generar tensiones espaciales con el paseo. Foto Gustavo Sosa Pinilla. La cubierta del auditorio también es inclinada para generar el anfiteatro. “De esta manera los únicos planos ortogonales de la propuesta son los que recomponen el tejido urbano”, dice Maletti.El programa requería foyer con guardarropas y sanitarios para el público, una sala de ensayos y un backstage con camarines y sanitarios para actores con accesos diferenciados, que se desarrollaron debajo del paseo que gira alrededor de la sala. El anfiteatro al aire libre, en la terraza vegetalizada del Brightman Hall. Foto Gustavo Sosa Pinilla. El acceso institucional de público se da sobre la calle Tucumán, en planta baja, a una recepción que balconea sobre el foyer en el subsuelo, al cual se puede llegar tanto por escalera como por ascensor.Una vez en el foyer, los espectadores ingresan a la sala al mismo nivel y suben a las filas través de su propia pendiente. Por su parte, los actores y servicios tienen un acceso independiente sobre la calle Borges, donde un pequeño hall los conduce a la planta inferior, donde se ubican el backstage y la sala de ensayos, al mismo nivel del escenario. El plano inclinado de la sala, sobre la sala de ensayo del Brightman Hall. Foto Gustavo Sosa Pinilla. Otro acceso importante es el de los alumnos, que se da directamente en el subsuelo a través de una gran escalinata que conecta con el espacio central de la manzana. El foyer también tiene dos conexiones con el edificio aledaño de Art & Sciences (también del colegio), tanto en planta baja como en subsuelo.Auditorio multifunción del Colegio NorthlandsLa sala tiene capacidad para 512 personas y fue diseñada para conciertos, música contemporánea, coros y prosa (teatro hablado), entre otras artes.Su geometría, su volumen, las características de su epidermis interior y su pendiente fueron cuidadosamente estudiadas para obtener la acústica e isóptica deseadas. La sala de conciertos del Brightman Hall posee la última tecnología. Foto Gustavo Sosa Pinilla “Se diseñaron sus filas curvas, paralelas a la geometría del proscenio, para optimizar la cantidad y la posición de los espectadores. En la parte superior posee un sector para las consolas de audio y video, más una salida que vincula con la parte superior del anfiteatro exterior. La rampa de acceso, con tratamiento paisajístico, del Brightman Hall, auditorio del Colegio Northalands. Foto Gustavo Sosa Pinilla. La sala de ensayo está acondicionada acústicamente y tiene la misma superficie que el escenario de la sala principal, lo cual posibilita ensayar las obras completas. Hasta ella se llega desde el foyer (acceso principal) y desde el backstage. En ocasión de un evento puede integrarse al backstage para incrementar notablemente su superficie.El foyer es el gran articulador del proyecto y, por sus dimensiones y geometría, unos de los espacios más importantes del conjunto. Se desarrolla en el subsuelo y en planta baja, conecta la sala con la calle y con los jardines del colegio y tiene contacto visual con el paseo que lleva al anfiteatro.A pesar de estar en un subsuelo, tiene abundante luz natural que proviene de lucernarios verticales que dan sobre la calle Tucumán y sobre el paseo verde. El plano inclinado, que es el piso de la sala, fue revestido en madera perforada, no solo por el acondicionamiento acústico sino para otorgarle calidez. La escalera de hormigón, protagonista del proyecto del Brightman Hall. Foto Gustavo Sosa Pinilla. “Posiblemente -dicen los arquitectos en la memoria descriptiva- la resolución técnica haya sido el mayor esfuerzo intelectual del proceso, con el objetivo de mantener la síntesis formal”.La coordinación entre la arquitectura y las ingenierías se realizó y verificó a través de un modelo BIM: construir un modelo digital permitió llegar a la obra con una documentación verificada, sobre todo para la estructura y la termomecánica.Las necesidades térmicas se resolvieron mediante la instalación de un sistema central. “Se hizo un trabajo muy bueno, posicionando canales por debajo del lobby para alcanzar un gran pleno entre las butacas y la losa, que redunda en un efecto confortable y de poco ruido”, explica Maletti. Vista de la sala de conciertos del Brightman Hall, del Colegio Northlands, en Olivos. Foto Gustavo Sosa Pinilla. Así, el aire tratado ingresa a muy baja velocidad desde un pleno enterrado, eliminando por completo los posibles ruidos del sistema y a la vez aportando los niveles de confort necesarios.Todos los aspectos se conjugaron para concretar una obra de excelencia, que fomente el intercambio y la creatividad. “Somos un estudio chico y de perfil bajo fundado hace 23 años. Y pensamos que este es nuestro mejor proyecto, tanto si miramos 23 años para atrás -concluye Maletti- y como para dentro de 23 años”Socios y docentesAlberto J. Maletti, Fernando Zanel y Lucas Maletti (dos hermanos y un cuñado) eligieron una frase de Amancio Williams para abrir la reseña institucional de su estudio: “La arquitectura es una de las formas más completas en que una época puede manifestarse, porque es la resultante de dos grandes fuerzas: el espíritu de la época y los recursos con que ella cuenta.” Familia de arquitectos. Lucas Maletti, Fernando Zanel y Alberto J. Maletti, en la sala del Brightman Hall. Recibidos en la UBA con pocos años de diferencia, los tres se dedican a la docencia en universidades de nuestro país, e incluso Alberto es profesor invitado en Universidad de Alcalá (Madrid), donde obtuvo un máster en Proyecto Avanzado de Arquitectura y Ciudad.MZM Arquitectos realiza estudios de factibilidad, anteproyectos, proyectos licitatorios y ejecutivos, dirección y gerenciamiento de obra, diseño urbano y gestión e intervención del patrimonio.Entre sus obras más destacadas se cuentan el edificio del Distrito Tecnológico del Itba (2013, ganado por concurso), el Hangar de Aerolíneas Argentinas (2012), el auditorio del Colegio del Buen Ayre, en Béccar (2014); el Colegio Los Candiles, en Pilar (2019.También, la intervención en la Iglesia del Salvador, ganadora del 1° premio CICoP/SCA (2005); el edificio de oficinas Efirenova, en Madrid (2010);el colegio San Juan el Precursor, en San Isidro (2010);Tortugas Green, en Tortuguitas (2014) y varias casas en countries del conurbano bonaerense.Ficha técnica Brightman HallAutores. MZM Maletti-Zanel- Maletti arquitectos; Alberto J. Maletti, Fernando Zanel, Lucas MalettiCoordinación de proyecto. Arq. Sonia Molina, Arq. Agustina Acosta Acústica. Ing. Alberto Haedo Estructura. Ing. Gerardo Urdampilleta Termomecánica. Ing. Julio Blasco Inst. Sanitarias. Arq. Ezequiel Arias Inst. Eléctricas. Ing. Carlos Grimberg Parquización. NL Arq Luminotecnia. UMAYA Fotos. Gustavo Sosa Pinilla Dirección de obra. Ing. Eduardo Sposito Gerenciamiento de obra. Sposito y asociados Construcción. Constructora Santiago Comitente. Colegio Northlands Ubicación. Olivos, provincia de Buenos Aires. Mirá también Edificio-rampa. El Brightman Hall se planta como una continuación del pulmón de manzana. Foto Gustavo Sosa Pinilla Vista aérea del Brightman Hall. Foto Gustavo Sosa Pinilla. El zócalo atenúa el impacto del volumen en el entorno de casas bajas. Foto Gustavo Sosa Pinilla La sala del Brightman Hall está girada 23 ° para generar tensiones espaciales con el paseo. Foto Gustavo Sosa Pinilla. El anfiteatro al aire libre, en la terraza vegetalizada del Brightman Hall. Foto Gustavo Sosa Pinilla. El plano inclinado de la sala, sobre la sala de ensayo del Brightman Hall. Foto Gustavo Sosa Pinilla. La sala de conciertos del Brightman Hall posee la última tecnología. Foto Gustavo Sosa Pinilla La rampa de acceso, con tratamiento paisajístico, del Brightman Hall, auditorio del Colegio Northalands. Foto Gustavo Sosa Pinilla. La escalera de hormigón, protagonista del proyecto del Brightman Hall. Foto Gustavo Sosa Pinilla. Vista de la sala de conciertos del Brightman Hall, del Colegio Northlands, en Olivos. Foto Gustavo Sosa Pinilla. Familia de arquitectos. Lucas Maletti, Fernando Zanel y Alberto J. Maletti, en la sala del Brightman Hall.

#38087251   Modificada: 21/05/2022 16:04 Cotización de la nota: $311.938
Audiencia: 1.022.580



Acceda a la nota web del medio

  
www.ejes.com | Leandro N. Alem 1110 7º piso - Buenos Aires | TE. 5352-0550